ElMosquitero

Desde hace un tiempo vengo observando que las aseveraciones que se realizan desde los medios de comunicación tradicionales adolecen de una cosa que en sí misma es básica para que éstos adquieran la categoría de verdaderos medios de comunicación. Verán porqué.

Desde el pasado día uno los medios nos bombardean con más y más noticias de discusiones, refriegas y encontronazos fortuitos entre comensales y propietarios de bar, al hilo de la ya tan manida ley anti-tabaco que el gobierno ha puesto en marcha. En los primeros días se dijo que había ya 800 denuncias por incumplimiento sin añadir después que esas denuncias se daban teniendo en cuenta que se producían entre una masa social de 45 millones de personas. 45 mill. de personas y sólo 800 denuncias.

Al mismo tiempo se obvia en esas noticias ofrecer el dato de la cantidad de peleas que se producen en los bares a causa del alcohol. La cantidad de denuncias a restaurantes que hay al día referentes a deficiencias higiénicas. La cantidad de denuncias por peleas callejeras que tienen en la droga su fondo particular.

Sólo se centran en la ley anti-tabaco y sus consecuencias, porque ahora el foco mediático está centrado sobre ello y ofrecen así a la ciudadanía una radiografía más que sesgada de la realidad, que lo que hace no es sino turbarla y confundirla al tiempo que la adormece en el más insultante de los aborregamientos de los que la Democracia es capaz de tolerar.

Pasado mañana lo de la ley anti-tabaco habrá pasado a la historia y el foco mediático buscará otro lugar sobre el que posarse, al igual que ha pasado en multitud de ocasiones, quedando para el recuerdo las máquinas de tabaco destrozadas a mazazos, los estúpidos delirios de martirios protagonizados por propietarios de bares venidos a objetores de leyes que están obligados a cumplir y ríos y ríos de tinta vomitados sobre kilos de papel en blanco dejando claras decenas de miles de posturas que al final sólo habrán servido para marear al ciudadano y hacer perder el tiempo a quienes ingenuamente creyeron que leyendo estarían informados.

Al final veo que el que está informado no es el que lee periódicos o blogs, sino el que asoma la nariz por fuera de la ventana y observa lo que pasa a través de ella. Hoy estaban los centros comerciales a reventar. Las rebajas han empezado y la gente, en un día laborable como hoy (yo estaba de puente pero no todo el mundo ha tenido esa suerte), llenaba bares y terrazas para comer de menú a diestro y siniestro.

Y ahí es donde ha quedado herido de muerte el segundo mito que los medios nos han vendido. Hay crisis, claro que hay crisis, pero la crisis no la están sufriendo los 45 millones de ciudadanos que hay en España. La crisis la sufren los cinco millones de parados…los demás simplemente no despilfarran como lo hacían hace tres años. Ni más ni menos.