blogday1Es curioso que lo que hace unos años era una seña de identidad y compañerismo, aderezada con un toque revolucionario de corporativismo bloguero y salpicada de reivindicativas intenciones dospuntoceristas como lo era el BlogDay, haya pasado sin pena ni gloria para el Top Ten de la blogosfera Hispana.

Esos mismos que hoy le han hecho un vacío inmenso a ese supuesto día tan especial para la blogosfera, son los que hace unos años se desgallitaban pidiendo la participación de todos nosotros en este tipo de iniciativas, sabedores de que con ello se iban a llevar un inmenso espaldarazo, en forma de enlaces entrantes, que les iban a servir para adquirir más visibilidad si cabía ante los diversos buscadores de Internet.

Si, de aquellos tiempos en que la autoridad de la difunta Technorati era el sistema con el que los bloguers se la median para saber cual de todos la tenía más grande. De aquella época en la que se exhibían los enlaces como si de muescas en la empuñadura del revolver se tratara. Cuando no participar en estos eventos lo convertía a uno en un paria social, frase que alcanzó su culmen de manos del gurú por excelencia Dans.

En aquellos tiempos presentar una iniciativa de este tipo era como colgar en una caña una zanahoria y plantarla delante de un asno. Todos nos dábamos por contentos con que uno o dos nos referenciaran y saludábamos a quienes se las inventaban con un cordial ¡genial! que creíamos era merecido.  No nos dábamos cuenta, pero la realidad era que en el cuento que se estaba redactando nosotros éramos los asnos y ellos quienes sostenían ante nuestros morros la caña con la zanahoria.

Habría que recordar que en aquellos tiempos las cosas no eran como ahora. Habría que recordar que en aquel entonces esto de la publicidad, los Comuniti-Managers, los emprendedores dospuntoceristas, eran visionarias predicciones que carecían de toda credibilidad. O al menos eso es lo que nos hacían creer.  Sí, se hablaba de búhos, de libertad de expresión (mal entendida a propósito evidentemente), de escribir cuando se quería y de lo que se quería…

Se decía lo que se tenía que decir con tal de que esos pobres ingenuos, que creían que sus enlaces eran simples agradecimientos, continuaran enlazando a los mismos de siempre para que éstos aumentaran su poder en la blogosfera. Había que inventar un día para los pobres como se inventó en la antigua Roma el Circo. La blogosfera no se daba cuenta, pero esos que ya se posicionaban como grandes blogs y A-Lists no emitían enlaces hacia fuera y sin embargo si se retroalimentaban entre ellos haciendo que la brecha entre ellos y el resto fuera más y más grande con le pasar de los meses.

Así las cosas, los blogs que siempre quisieron llegar a donde estaban los primeros, se desvivían enlazándolos día sí y día también para conseguir que en algún momento de debilidad éstos les devolvieran ese enlace que tanto valor tenía para los segundos. Les mendigaban las referencias y para eso los atiborraban de enlaces que valían cien veces más que las miserias recibidas.

Y los pequeños. Los pequeños llegaban a este mundillo piramidal en que se había convertido la blogosfera y se veían también arrastrados por los blogs medianos a continuar con el carrusel de adoración de unos blogs que ya no entendían. Y no los entendían porque ya no contestaban a los comentarios o los cerraban, porque renegaban de sus convicciones cual hermanos Marx y sacaban unas nuevas con las que continuar evangelizando a los nuevos y los antiguos, porque caían en la misma trampa que los medianos habían sufrido hacía un tiempo y ansiaban poder llegar donde los primeros.

Y los medianos se aprovecharon de eso. Decidieron que lo mejor era mantener la mentira de la adoración a los grandes y convertirse en medio para llegar a éstos. Así pues, decidieron hacer creer a los novatos que la única manera de que pudieran llegar a ser referenciados por éstos era que lo fueran primero por ellos mismos. Decidieron jugar la misma baza que antes jugaron los top ten con ellos y les salió fetén.

Y los grandes los miraron divertidos. Ahora ya ni siquiera hacía falta inventarse iniciativas ni chorradas de esas, los que antes fueron pequeños y ahora se habían convertido en medianos les hacían todo el trabajo sucio. Y mejor aún, los continuaban referenciando aunque solo fuera para que los más pequeños creyeran que aquello era importante.

Pero se equivocaban. Los medianos y los pequeños se equivocaban. Porque los enlaces ya no eran lo más importante. Ahora lo era el dospuntocerismo comercial, los comuniti-managers y la creación de redes de blogs. El negocio en internet estaba en crearse empresas basadas en blogs y de ahí saltar a la desvirtualización que proporcionaban las mesas redondas, las reuniones con los ministros y las concentraciones dospuntoceristas de eventos y demás celebraciones.

Y entonces muchos pequeños dijeron que ellos solo blogueaban por gusto y descubrieron las Redes Sociales. Pero aún ahí llegaron tarde porque cuando lo hicieron descubrieron que ya estaban pululando por allí los que eran grandes en la blogocosa y hasta allí les había llegado el impulso. Se encontraron con que los que eran grandes en la blogosfera lo eran también en las Redes Sociales y eso los dejaba en el mismo lugar que antes.

Pero ellos decían que no querían llegar a ser top ten de nada porque ya se sentían desengañados, aunque la realidad era que ya nada importaba lo que dijeran. Los que eran grandes no necesitaban ya de los pequeños ni los medianos. En una blogosfera desvirtualizada como era aquella en la que por fin vivían, entrar en el Top Ten era inmensamente más complicado que cuando lo que nos hacía reconocibles los unos a los otros era nuestro nick personal. La partida estaba ganada y el negocio a salvo de cualquier intruso. Los Top ten ya sabían que lo seguirían siendo hasta que se cansaran de serlo, hasta que ya no les hiciera falta serlo para mantener sus negocios.

Y entonces llegó el twit definitivo…

blogday2

Un post que ha sido posible gracias a los dos twits de Marcelino Madrigal y a la memoria plasmada a vuela pluma de un servidor de ustedes.

8 Comentarios:

    es una pena que no cites a nadie de esa blogosfera top ten. Te tiras media hora enrrollándote y no aportas el nombre de ningún blog de gurús como Dans, Escolar, Periodistas 21, Madrigal o La huella digital. ¿Es que no te atreves o es que tienes amiguitos en esos lares?

    @ast no hace falta mencionarlos porque de todos es sabido cuales son sus nombres. Además, y es que hay que explicártelo todo, el las capturas de Marcelino se ve claramente a qué blogs me refiero. Amén de que no soólo son los que allí en el Top Bitácoras aparecen, sino muchos otros que les andan muy cerca como los que ocupan los top50 o top150.

    Por cierto Nacho, no sufras que ya tengo bastante con las tonterías de otros para tener que aguantar las tuyas...

    ¿Nacho?

    Yo ya me entiendo...

    El único Nacho internetero que conozco lo tengo más o menos cerca en una empresa con cientos de ordenadores y una IP única jajaja.

    Sí y se apellida De la Fuente...pero déjalo ya, haz lo que quieras y si lo deseas escribe un blog, que es gratis...y ponle de nombre 'ast, el troll al que nadie quiere'.

    jejeje

    Es buen chaval, un compañero pelín obesionado con todo esto de Internet. Igual me abro un blog para poneros a todos los 2.0 a parir, al estilo de Madrigal, que siempre está enfadado con el mundo. Bueno, a cambiar el nick. Byeeee

    Adiós...

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