Hace unos días se celebró día del blog. Día que por supuesto pasó desapercibido para una blogosfera ya inmersa completamente en el micro-blogging y que limitó las fiestas a unos pocos posts recordatorios que fueron más testimoniales que otra cosa. El caso es que mientras leía unos cuantos posts acerca de ello, me di cuenta de que servidor era una especie de rareza en la biodiversidad que por aquí habita. Y la rareza estriba en que no se el día en que comencé a escribir en un blog.

Uno ve con cierta envidia cómo muchos celebran sus cumpleaños blogueros con infinidad de agradecimientos y reseñas de compañeros de viaje. Incluso ve cómo otros tantos les recuerdan a los propios autores que se acerca su aniversario bloguero. Pero díganme una cosa señores ¿no les ha extrañado nunca que yo no celebrara una cosa así? Más cuando en ésta bitácora la blogocosa siempre tuvo una importancia proverbial en lo que al contenido del blog se trataba...

La realidad es que no lo celebro por la sencilla razón de que no se cuando comencé a escribir en un blog. Puede que sí pudiera decirles quienes estaban ya por aquí. Marcelino podría ser uno de ellos, como también Manuel, Adolfo, Rogelio, Enrique, Ricardo, Fernando...todos eran por aquel entonces ya grandes de la blogosfera y también mucho más cercanos, más de la tabla rasa. Hoy, al igual que servidor, viven un tanto alejados de todo y no se preocupan, por tiempo o por ganas, de hacer aquellas interminables rondas de blogroll con la que dar los buenos días, que al final todos acabamos reconociendo como vacías y falsas. Incluso vi nacer blogs que en poco tiempo alcanzaron la cima y se desvanecieron como polvo arrastrado por un viento huracanado. Blogs que saltaron a la fama en concursos y que convirtieron a sus autores a los primeros bloguers en escribir en periódicos digitales. Recuerdo un taxista, uno con una mesa que cojeaba...Incluso un montón de bloguers que acabamos formando una cosa llamada 'Cuadrilla'...

Puedo recordar el estado en que se encontraba la blogosfera. Recordar aquellas luchas porque un tal Enrique Dans se empeñaba a negar que los Spaces eran blogs. Recordar también cómo se debatían esas cosas en los eventos en los que se ponía sobre la mesa qué era y qué no una bitácora. Rememorar cómo para desacreditar a los Spaces se los tildaba de simples Redes Sociales. ¡Qué vista tuvieron entonces aquellos tipejos!

Recuerdo también que en aquella época la parte de la blogosfera que hoy es profesional enarbolaba una bandera con un búho como escudo en contra de la publicidad. Y también haberlos visto recular ante un cheque y sin cambiar el paso darse la vuelta y defender lo contrario sin siquiera pestañear. Recuerdo las rondas de antes. Los comentarios con un simple "buenos días". E incluso recuerdo conversaciones, verdaderas conversaciones en los comentarios que alargaban interminablemente las entradas, haciendo que la lectura de las mismas se hiciera prácticamente imposible al tiempo que transformaban los posts en lo más parecido a un foro que pudiera recordar.

Recuerdo la explosión de éxito que tuvieron los blogs de ayuda. El reconocimiento que éstos atesoraban en la blogosfera y el verdadero favor desinteresado que ofrecían a sus lectores. Y también recuerdo a los traductores, aquellos que limitan su productividad blogueril a realizar traducciones de blogs anglosajones sin mentarlos para hacerlos pasar por propios. Sí de eso aún hoy puedes encontrar por esta blogocosa nuestra.

Recuerdo no saber enlazar y aprender a hacerlo mientras comprendía que 'enlace' e 'hipervínculo' eran lo mismo. Aprender a subir fotografías y hacerlo sin robarlas del hosting de quien las subió antes. Aprender palabros como 'Hotlinking' que se referían precisamente a lo anterior, como 'host' o como 'dominio'. Recuerdo principalmente aprender sin descanso cada día una cosa nueva.

Recuerdo las guerras para saber qué plataforma era mejor para bloguear. La llegada de la publicidad, la profesionalización de la blogosfera, el Facebook, el twitter, el tuenti, el fourquare, el LinkedIn y demás herramientas que después pasaron a llamarse dospuntoceristas. Pero lo que principalmente recuerdo es aprender a reconocer cuanto bien me podía hacer el blog a mi mismo. Cuanta libertad, educación y capacidad de pensar me podía ofrecer algo que simplemente estaba subido a una nube digital intangible. Cuanta capacidad de asimilación y comprensión me podía ofrecer una simple bitácora.

En fin que yo no recuerdo cuando comencé a escribir en un blog. Creo que fue por allá el 2004 o 2005. En aquel entonces ni siquiera sabía que lo que hacía era escribir en un blog y ese blog lo borré por culpa de un cabreo descomunal con Microsoft porque se empeñaba en censurar Barts que enseñaban el culo. Y también madres que daban de mamar a sus hijos. Incluso Davids de Miguel Angel. ¡Aquello sí que era luchar contra molinos de viento!

El caso es que no podría poner una fecha y por eso no celebro aniversarios. Será que siempre me parecieron un recordatorio de lo viejos que nos hacemos. Y uno, que es muy cuco para estas cosas, prefiere no cumplir ninguno antes que sumar edades que poco o nada le aportan a quien, en espíritu, siempre será un jovial y enrabietado usuario.

En fin, he aquí mi tardío pero no por ellos menos emotivo recordatorio del día del blog.

6 Comentarios:

    Bueno...para saber en que día comenzaste por aquí, por lo menos este blog, solo basta irte al primer post que escribiste y ver la fecha...aunque si fueron otros tus comienzos y ya no existen...es como tú dices...es mejor no celebrar...porque en realidad...lo celebras cada vez que escribes y te sientes bloguero....besooosss

    @Marita la fecha del 'sobre mi' es artificial. Puse la entrada bastante lejos para que no apareciera mezclada con las otras. En fin, que sí que podría datarlo en mayo de 2004 o 2005...pero prefiero no hacerlo y vivir sin edad ninguna jejeje

    Antonio, este vale por todos los que no escribiste antes. Me ha gustado mucho. Es lo que hay sobre este otro universo que nos atrapa y nos enciende, p que un dia se apaga definitivamente por multitu de causas. Buen dia. Un cordial saludo

    @Froilán De Lózar pensando en eso lo escribí amigo mio.

    Por tus palabras querido amigo me has parecido un viejo inadaptado,ja,ja,ja a los cambios que se han producido desde aquellos años.

    Los que seguimos en este mundillo desde hace unos años hemos visto todo lo que relatas pero por "pelotas" nos hemos ido amoldando a lo que llegaba nuevo, a la nueva forma de leer más rápido y hacer un RT o +1 en aquello que nos gustó sin necesidad de dejar esos buenos días.

    A veces pienso como tú, menudos cambios hemos vivido, pero me queda mucha locura en la mente para seguir dando guerra en cada entrada y divertirme con esos que nos leen y comparten u odian nuestros artículos.

    Pero lo más bonito Toni, es que aquella cuadrilla que mencionas sigue viva en muchos de nosotros, yo les siento muy cercanos a pesar de que la vida a alguno le está dando buenos palos, pero su aliento está latente y leído por los que nunca perdemos de vista a nuestros amigos y es que Toni, acá hemos hecho unos lazos de amistad que bien sabes que superan esos buenos días en un comentario o esas añoranzas por un debate.

    Venga no te vuelvas viejo y sigue siendo un loco de la blogosfera, en este manicomio de los blogs que siempre nos ha dejado más cosas buenas que recordar que malas que olvidar.

    Un abrazo y por cierto BUENAS NOCHES.

    @Senovilla tú lo has dicho, lo más bonito son las cuadrillas de amigos cibernautas que se forman y sobre todo la sensación que le queda a uno de creer que puede que los conozca incluso mejor de lo que es capaz de llegar a reconocer e imaginar.

    Un saludo de vuelta!

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