ElMosquitero

Hacía mucho tiempo que esta idea me rondaba la cabeza y creo que hoy, y tras ver cómo está evolucionando la situación con respecto a Spaces, su movimiento hacia una red social, y las derivas radicales y absurdas de las protestas de los Spaceros con respecto a la censura en aquella plataforma de blogs, he decidido eliminar finálmente mi blog de Spaces y pasar definitivamente esta lastimosa y cansada página de mi vida blogueril. Si amigos lectores, hoy muere definitivamente La Pardalá. Acabo con esta prolongada agonía del que fue mi primer blog, en un día en el que uno está triste porque ve como aquellas protestas, que antes se hacían a lo loco y sin pensar muy bien en cómo nos hacían quedar frente a los demás, no han evolucionado nada y continúan cada día más radicalizadas. Puede que en la anterior entrada, servidor se equivocara al llamar borregos a aquellos que se dedicaban a dejar comentarios spameros en el blog del EBE08, y por eso pido de nuevo, como ya hice antes, públicas disculpas (a sabiendas de que no están siendo aceptadas). Se que allí ahora soy un ogro, un ser vil que los insulta, pero no se dan cuenta de que poco importa lo que yo crea, la que juzga es la blogosfera y puedo decir muy convencido que esa batalla, la de la credibilidad, la están perdiéndo con cada comentario dejado en lugares que no están destinados a ello. Han creído que el EBE era un lugar tan bueno como cualquiera para hacerse oir, y lo es, pero no llegando a martirizar a sus organizadores a base de comentarios, dejados por gente que ni si quiera leía la entrada en cuestión, y a los que solo les importaba que Microsoft había patrocinado dicho Evento. Me apena ver como una protesta, que en sus inicios fue justa y llevada con mucha sangre fria por un amigo como es Marcelino, ha ido derivando en una salvajada de manos de los organizadores del Evento anti-censura que han pedido a sus lectores, sin miramiento ninguno, que fuesen puerta a puerta lanzando manifiestos y llenando de basura aquellos lugares que tal vez, con una protesta ordenada y no molesta, les hubieran podido ayudar. Siempre dije que uno se sentía aún un spacero más. Aún lo soy y aún me siento así. Pero una cosa es sentirse y otra muy diferente es pensar que uno aún tiene un lugar entre esta gente. Soy amigo de algunos de los que participan en dicho evento y no se si la entrada de ayer ha terminado por eliminar esta amistad de nuestros corazones. Sé que a Coki le dolió especialmente lo que dije ayer, y casi se podría decir que por ella lo retiré, pero creo que se equivoca al mantenerse a ese oscuro lado de la trinchera. Yo siempre digo lo que pienso. Aunque me cueste enemistades. Para faroleros que hablan solo de lo políticamente correcto ya tenemos bastante con los políticos. Yo opino, y esta decisión, que tomé casi con cuatro o cinco meses de vida blogueril, la llevo hasta el extremo. Me ha costado muchas enemistados decir lo que pienso. Hablar sobre las cosas que creía justas y las que no. Hay mucha gente que alguna vez se ha sentido ofendida por mi, y solo porque expresé mi opinión. No saben muchos, que los más cercanos a ellos simplemente no les dicen la verdad y se dedican a susurrarles a los oídos las cosas que ellos mismos quieren oír. Ir en cuadrilla a un blog, para hablar sobre lo mismo todos a la vez, y esperar que el responsable de dicho blog no decida, de forma lógica y comprensible, moderar los comentarios para eliminarlos es el colmo del despropósito. Este tipo de protestas ya se hicieron antes y yo también participé en ellas. Lo reconozco, pero con el paso del tiempo he aprendido a pensar por mi mismo y a saber que esa forma de desvandada general hacia ninguna parte no es ni buena ni constructiva. Si algo he aprendido en mis cuatro años y pico de bloguer, es que la ÚNICA forma de protesta acorde con el medio que disponemos son los artículos personalizados. Expresar nuestras opiniones libremente en nuestros blogs y elegir donde las plasmamos. Si Spaces no nos quiere allí, hay otras plataformas que nos aceptarán con los brazos abiertos. Luchar desde fuera no es malo, yo lo he hecho durante dos años. Eso sí, puede que esos que han dedidido quedarse lo hagan no por ser consecuentes, si no porque sus lectores no los seguirían a otro blog. La soledad de comenzar de cero. Eso lo he vivido yo. Cuando cambié de plataforma hubo días en que mi blog no tuvo ni una sola visita. Ni si quiera los buscadores lo encontraban. Estaba solo y hablaba para mi mismo. Mucho tiempo me costó el comprender que los lectores solo volverían si continuaba escribiendo de la misma forma que lo hacía, sin perder el ánimo, con paciencia. Es muy duro ver como en tu blog tienes mil y pico visitas diarias, y que cuando decides cambiar de plataforma solo unos pocos acaban por seguirte. ¿A qué seguían, a un Spaces o a su autor? Esa es una pregunta que solo ellos saben responder. Yo creo que los que no aceptan que en Sapces no habrá ningún cambio significativo en referencia al Código de Conducta, son aquellos que tienen miedo de volver a hablar con las paredes en sus blogs. Es muy duro ver la realidad de tus lectores, ver que no eran tan lectores como pensabas y que muchos buscaron solamente el que les devolvieras la visita para sí incrementar sus estadísticas. De esta gente hay a miles en la blogosfera, pero uno nunca cree estar en esa tesitura hasta que los echos se lo demuestran. Acabo con el blog de Spaces. Finalmente acabo esta desilusionante entrada, despidiéndome de todos los Spaceros que alguna vez comprendieron mi postura. Elimino las pocas entradas que tenía en el blog de La Pardalá y lo cierro definitivamente. Han sido cuatro años ilusionantes que han acabado como el rosario de la aurora, pero de los que ni mucho menos me arrepiento de nada. Bueno si, de una cosa si, de no haber cerrado antes esta triste y agotadora etapa. En el Proyecto Blog se han hecho entrevistas y una de las preguntas versaba sobre la censura. Muchos han dicho que no la sentían y achacaban la pregunta a la propia censura, la autocensura. Sirva esta entrada para demostrar que hay muchos lugares en la blogosfera en los que la censura sí que existe. Solo hay que decir lo que de verdad se piensa y en los lugares en los que decirlo te puede traer problemas. Un saludo y una lagrimita por el blog que uno deja atrás definitivamente.