Por más que intento ignorar la corriente de odio que inunda las calles de nuestra nación, acabo capitulando ante la evidencia de que lo que pensamos un día curado con la transición, no fue más que una herida cerrada en falso que cuarenta años después ha comenzado a supurar de nuevo toda la pus que guardaba en su interior.

rey-firmando-constitucion Habrá quien diga que es lo mejor que podría pasar, que es necesario que esto suceda para que la reconciliación nacional sea algo más que una simple unión de palabras parida por el antiguo Partido Comunista, hoy convertido en el casi extinto IU, y que ello nos llevará sin remedio a una verdadera paz social que este país no ha vivido nunca en toda su historia.

Yo más bien creo que si hubo algo bueno en la transición fue el perdón mutuo. Y eso lo hemos perdido nosotros, los que menos razón teníamos para remover los cimientos de la democracia sobre la que subsistimos. Nosotros, tipos que hemos nacido al final de la dictadura, que no la hemos vivido, o que ya nacimos en plena fiesta democrática, hemos sido los que con nuestras opiniones nos hemos dedicado a calentar el fuego bajo el que seguro todos arderemos a mucho no tardar.

Lo peor que le puede pasar a una sociedad, es que en lugar de heredar de su pasado las cosas que la unen, herede justamente todo lo contrario, sus diferencias.

Revivir una y otra vez en los medios las desgracias que provocó el Franquismo, sacarlo a la balconada para que sea abucheado públicamente cuando ya nadie en España salvo una pequeñísima minoría lo aplaude enfermamente convencida de su idoneidad, es lo mismo que mentar la soga en casa del ahorcado.

Claro que todos estamos de acuerdo en que el Franquismo fue un error garrafal de nuestra sociedad. Pero eso no implica que ahora, cuarenta años después de aquella reconciliación nacional, los hijos y nietos de sus artífices tengamos que acabar haciendo justo lo que nuestros padres y abuelos evitaron tan sabiamente.

garzonYo ya les digo lo mismo que dije hace más de un año.

Si desean que las búsquedas de cadáveres de republicanos y anarquistas fusilados por los Franquistas sean realizadas para ofrecerles una sepultura digna, amén de una restitución de su memoria que nos haga recordar para siempre el salvajismo al que nosotros mismos somos capaces de someter a nuestros propios conciudadanos, acabemos de una vez con los jueces partidistas que utilizan su poder para levantar del suelo sus togas con tal de que no se manchen con el polvo del camino.

Acaben con ese juez Garzón, ese hombre que con tal de mantenerse en el puesto es capaz de reabrir las heridas más profundas que jamás un país podrá tener nunca. Ese hombre que nunca debió volver a la Audiencia Nacional tras haber ido de la mano de un partido político a las Elecciones.

Sí, que lo haga cualquier juez y verán como no hay ningún problema. Que se haga sin participación política y verán como no se alza ninguna voz en contra. Que se limiten a destapar las fosas para ofrecer sepulturas dignas y verán como miles de ciudadanos de derechas e izquierdas se unen sin mediación política para curar lo que este desgraciado de juez Garzón ha provocado en la sociedad Española.

No entiendo cómo se puede defender a un juez de semejante calaña. No entiendo como le pueden aplaudir ustedes cuando a lo lejos se ve que tan solo los utiliza.

3 Comentarios:

    Creo, amigo Antonio, que esta vez no estoy de acuerdo contigo.

    Pienso que seguir ahondando en este tema, seguir dando esta noticia un día sí y otro también en los medios de comunicación, seguir poniendo post todos los días en la red, seguir clamando al cielo por una "justicia" según el color con el cual se exprese..., es seguir haciéndole el juego, a unos y otros, en este tema tan espinoso que tanto se ha politizado.

    Sigo pensando que es simplemente un debate político, de politiquillos, de jueces con colores predeterminados, de gente con miras políticas y envídias de poder... que no hacen otra cosa que desviar la mirada del pueblo, del ciudadano de a pié, de los verdaderos problemas que acucian a nuestra sociedad en la actualidad.

    Creo que el panadero de nuestro barrio, el fontatero, el camionero, el parado de la cola del inem (servef en tu caso), la María que lleva a los niños al colegio, etc, etc..., es decir el PUEBLO, (la plebe para algunos), el populacho para otros, osea el pobre ciudadano de a pié (que es en definitiva los que pagan los platos rotos de las controversias de los nefastos políticos que nos gobiernan y de los que andan en la oposición, que deambulan perdidos sin ideas, ni oficio ni beneficio, que sólamente añoran el sillón del poder, y no son capaces de dar soluciones a un gobierno sin solución)... Sigo pensando que al ciudadano llano, no le preocupa con tal extremismo como se nos hace creer, este problema tan politizado, y tampoco, en un hipotético baremo, ocuparía esta cuestión un alto nivel de preocupación en esa escala, emcumbrada, sin discusión alguna, por los graves problemas de hoy día:

    - Crisis, paro, llegar a fin de mes, poder comer todos los días, asegurar un puesto de trabajo estable, pagar su hipoteca a fin de més... y un sinfin de problemas que acucia nuestra vida actualmente para seguir sobreviviendo en esta cada vez más calamitosa sociedad.

    Y esos son los verdaderos problemas que le preocupan a Pepe, Antonio, Juan, María, Luisa..., y que son los que verdaderamente hay que resolver y con urgencia. Y por supuesto entre todos, entre la clase política (gobierno, oposición y demás partidos) y el pueblo, que es el soberano, y en definitiva quien sustenta los pilares de un estado democrático y de derecho.

    No está la solución en minusvalorar lo que este juez y los políticos están alentando con sus declaraciones. No olvidemos que hacía años que no aparecían tantas veces seguidas tantos franquistas y republicanos enfrentándose en la calle en manifestaciones y contramanifestaciones.

    No olvides que en una sociedad en la que la política en sí no importa más que cuando se va a votar, y en la que el 80% de los votantes tiene su voto ya decidido de antemano, crear un conflicto en un tema que los separa radicalmente a los dos en dos bandos diferenciados es lo mismo que recrear sin necesidad alguna aquellos barros que nos trajeron los detestados lodos.

    Claro que lo que le importa a la gente es el paro y la economía particular suya, pero no olvides que todo esto se hace con un claro afán partidista para evitar que moralmente se pueda votar a uno u otro en la hora de las elecciones.

    Pongamos un ejemplo. Un señor podría ser votante de derechas y haber tenido un abuelo fusilado por republicano. La maniobra a la que están sometiendo las plataformas pro-Garzón y los propios políticos de izquierdas a este ciudadano le impedirán, en buena medida volver a votar a la derecha porque le están haciendo creer que ésta está en contra de que él recupere el cuerpo de su familiar.

    Tú y yo sabemos que eso no es cierto, pero para la gran mayoría de ciudadanos que viven pendientes de un solo medio de comunicación eso es con lo que llegarán pegado a la retina cuando tengan que ir a votar.

    Crear bandos de esta clase cuando todo esto ya debería estar más que superado solo puede acabar mal. Queramos o no verlo venir. Queramos o no darle importancia.

    Anónimo el 27 de abril de 2010, 0:29 dijo...  

    Es que esto de que uno que intentara ser Ministro en un Gobierno volviera a ser juez... Siempre generará controversia, y más cuando tenga las tres causas pendientes que éste de momento tiene.

    Saludos mosquitero

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