Dirán ustedes que a qué viene el título del post. Pues bien, imaginen que ustedes tienen su blog en una plataforma como Blogger. Imaginen ahora que esa plataforma, Blogger, decide dar un paso de gigante en la usabilidad de los blogs y adapta las bitácoras de las que es responsable a los dispositivos móviles.

Ahora imaginen que ven cómo un bloguer, que se supone tiene una reputación dentro de la blogosfera, decide anunciar que su blog está adaptado para esto sin mencionar que eso lo hace gracias a la plataforma en la que tiene su bitácora.

Y ahora piensen en cómo lo admirarán los bloguers que llevan poco tiempo en esto y que ven cómo de repente ese usuario tan nombrado por la red ha sido capaz de hacer algo así. Imaginen cómo lo mirarán a partir de ese momento y la cantidad de lectores que pasarán a ser seguidores que tendrá y que le reirán las gracias porque a sus inexpertos ojos él no es ni más ni menos que un tío que sabe de esto y que les da mil vueltas en círculo antes de que ellos lleguen a pestañear.

Pues bien, es de esta forma, que no de otra, como esos mal llamados grandes bloguers o A-lists han llegado a ser lo que no deberían seguir siendo. Alardear de cosas de las que uno no es responsable y dejar constancia de ellas sin aclarar que los éxitos y los avances no son de producción propia, sino que son consecuencias de acciones que nada tienen que ver con lo que uno hace, no es otra cosa que una forma de mentira piadosa que tiene como único objetivo el parecer más listo de lo que uno finalmente es.

Recuerden, más vale ser sincero y paleto y reconocerlo, que intentar tapar alguna de esas dos cualidades. La más de las veces, intentar tapar la segunda sólo nos traerá el drama del desenmascaramiento de nuestra verdadera personalidad. Y no lo olviden, a veces uno queda más defraudado por las chorradas que se puedan decir, que por las propias acciones que esas chorradas llevan consigo.

Pd: Resulta curioso que acabe de intentar entrar en la versión móvil del blog en cuestión y haya tenido el problema que tan bien explica Oloman en su blog. Curioso que de eso del blog adaptado para los dispositivos móviles sólo haya un post y ningún resultado a la vista…

Pd 2: Interesante artículo el que acabo de leer de Ángel y que expone a la perfección este problema con los alardeos de cosas que no son fruto de nuestro trabajo y que él sabiamente extrapola a la televisión y los gurús de ésta…

Personalmente me produce un inconfesable rechazo la boca de aquellos que ocupando apenas medio metro cuadrado del salón de mi casa aseguran con tanta vehemencia y soltura, durante tanto tiempo, las verdades más espurreas y absurdas. Con la seguridad del experto exponen todo lo que citan y hablan, con una vocalización intachable, con una seguridad aplastante. Dan explicaciones, o lo que es más sórdido, opiniones, que, la más de las veces, en oídos de quienes sí conocen el tema en cuestión, son una colección de variopintas meteduras de pata (peligrosas tanto en cuanto alguien pueda escuchar con interés y asumirlas como verdades).


Pero cuando no tienes ese conocimiento y el presentador de turno afirma así o asado sobre este tratamiento médico, sobre aquella acción política, sobre esa situación economía o sobre Internet y, aunque no nos guste oírlo (porque Motos lo sabe, tras verificarlo, contrastarlo, medirlo y tallarlo), el 80% y el 90% de lo que se dice, es mentira. Recuerda, lo quieras admitir o no, así es, él lo afirma, aunque seguramente saltará al escenario algún friki que criticará sus palabras. Internet es una gran mentira, es el diablo, la heredera del 666; allí sólo quieren estafar y sacar el dinero a tu abuela. Y si critican esa bendita exposición sobre la realidad de la red, no será por la metedura de pata, la falsa y peregrina afirmación, el tradicional mete miedos tan oportuno, hoy, precisamente sinde-hoy, sino porque ese geek que critica al presentador no quiere admitir como verdad irrefutable que, casi todo es mentira.

4 Comentarios:

    Gracias por esa mención. El asunto de Motos acabó de una manera muy curiosa, con invitación al plató y todo :D. Lo que no quita para seguir pensando lo mismo de los presentadores televisivos. 8P

    Un abrazo Navideño!

    (Y tú dirás que hago el 25 comentando, pues haciendo tiempo un ratito, matando el vicio y visitando un blog que me encanta y hace casi 10 días que no leo. ;)

    @Angel Cabrera tu comentabas, yo escribí un post a las siete y media de la tarde jajajajaja

    Hola, Antonio:

    Vengo desde el blog de Oloman. Y vengo a traerte un buen ejemplo de lo que dices, pero a la inversa. La idea de Oloman la tomó de mi propio blog. Y así lo hace constar Oloman al final de su entrada.

    A su vez, mi post fue inspirado por uno de Pizcos, y también lo cito y enlazo, por supuesto.

    ¿Tanto cuesta ese gesto a algunos?

    Te lo digo en Oloblogger, pero te lo repito aquí: dice mucho en tu favor que digas el pecado pero no el pecador. Lo fácil hubiera sido decirlo, pero has aguantado con elegancia la tentación.

    Un saludo, felices fiestas y feliz año nuevo, vecino (en tu perfil dice que eres de Algemesí, yo soy de Almussafes, estamos cerquita, ¡je, je, je!)

    @José GDF bueno, pues sí que estamos cerca de verdad jajaja

    José, dices que eso de no decir el pecador dice mucho de mi. Debo decirte que para otros más bien dice todo lo contrario.

    Enlazar...ese acto tan complicado de ejecutar en esta blogosfera de hoy en día...

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