Bien, he llegado a casa y me dispongo a escribir de aquello sobre lo que durante toda la semana he estado escuchando hablar en la radio, la #spanishrevolution. Y solo tengo una cosa que decir; no me gusta.

Y no me gusta no por lo que piden, por lo que representan o por sus peticiones. Que hay que reconocer que son buenas, precisas y deseables para el buen funcionamiento de cualquier democracia, aunque haya algunas que se salgan de lo plausible y caigan en la mera fantasía del que cree que todo el mundo es bueno y que los malos nunca deben gobernar. Sino por la sencilla razón de que a las doce en punto del día de hoy, hace exactamente unos minutos, están cometiendo un delito del que se librarán por una menudencia llamada “tumultuosa aglomeración de ciudadanos” ,que hace más que aconsejable para su seguridad que la policía se abstenga de actuar.

Estoy con vosotros. Me gustan vuestras propuestas, al menos algunas como las que se refieren a las reformas electorales y esas cosas, pero me niego a combatir la ley con el delito y vosotros, queráis o no, estáis cometiendo uno impidiendo al resto de ciudadanos disfrutar de otra menudencia llamada “jornada de reflexión”.

Como se dice muchas veces, a veces las formas nos hacen perder la razón. Hoy la habéis perdido vosotros.

2 Comentarios:

    Lo que está pasando en la acampada de Sol es completamente legal. Se ha corrido la voz de que no se utilicen consignas ni pancartas para respetar el día de reflexión. Además de que ésta tampoco está reflejada en la Constitución y de que los medios se la han saltado por la torera. Poco se puede criticar de las formas, si se trata de 25.000 personas reunidas de forma pacífica en grupos pequeños. La gente puede reflexionar en cualquier parte, y yo luego me iré allí a leer un buen libro: espero que no se trate de un acto demasiado rudo. En cuanto a lo que se pide, el mensaje principal es muy claro: reformar la ley electoral para favorecer a los partidos minoritarios y evitar la corrupción. Luego hay otras reclamaciones secundarias, como el respeto a los derechos humanos en cuanto a vivienda y trabajo. El resto son propuestas que hace la gente por su cuenta: no son exigencias, sino formas de arreglar esta situación, para que luego no se diga que no hemos intentado ofrecer alternativas. A mí tampoco me gustó nada encontrarme con la abolición de la propiedad privada y otras barbaridades, pero hay que entender que eso son las propuestas constructivas que aporta cada uno, y que no son compartidas por todos.

    @Francisco J. Moreno es ilegal, o al menos eso es lo que dicen los jueces. Y créeme, ellos saben de leyes más que nosotros. Otra cosa es que lo del día de reflexión tenga que mantenerse cuando los mismos periódicos están llenos hoy de proclamas en favor de sus favoritos...

    Por erso, y solo por eso, hoy voy a la concentración de Algemesí.-

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