Hoy nos deja Joan en su blog el relato de una mujer que sufrió abusos sexuales en la infancia de parte de su tío. Estremecedor relato en el que se ve reflejada la cruenta realidad que muchos niños viven en su día a día. No comienza así el relato, pero sí es justo el comienzo de su terrorífico testimonio:

Hasta acá, siempre me he sabido abusada sexualmente, y en este nuevo proceso que he iniciado me estoy ocupando de las secuelas, de las consecuencias, aunque todavía me cuesta mucho empezar por donde debo; allá donde más duele. ¡Me cuesta tanto recordarme y reconocerme en esas situaciones! No me gusta hablar de ello; nunca he podido sacar fuera esos recuerdos que, como dagas encendidas, corren y queman las venas, las entrañas…

Hasta donde se, lo único que sabemos de la autora de este cruel testimonio es que se llama Lorena. Tal vez sea mejor no poder personificar a la protagonista de esta agónica historia, ya que de ese modo, no caeremos en la tentación de pensar que solo ella ha sufrido los abusos sexuales. Saber que muchos de los que hoy son adultos han pasado por ello, y pensar en la inmensa cantidad de los que lo estarán sufriendo ahora, puede que sea mejor para los fines que pretende la acción de hacer públicos estos sucesos.

Muchas veces nos centramos en lo que ocurre en las Redes Sociales. Relatos como este nos recuerdan lo sencillo que les es hacer realidad sus sueños. Esos sueños que en los niños se tornan pesadillas.

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