ElMosquitero

Hace unos años empecé mi periplo blogueril en La Pardalá, blog que continúo manteniendo, sin saber que lo que yo tenía por un spaces era en realidad un blog en toda regla. Es más, ni si quiera sabía de la existencia de estos. Transcurrido el tiempo y después de descubrir a Marcelino y a su blog Herramientas para Blogs, comencé a interesarme por todo aquello que la blogosfera abarcaba. Poco a poco fui saliendo de mi ignorancia, para descubrir que aquello que comenzó como un spaces, se convertía poco a poco en mi herramienta de libre expresión más fiable y segura. Durante bastante tiempo permanecí en la ignorancia de creer que todos aquellos que tenían su blog fuera de spaces eran gente que sabía de programación y demás. Yo no soy dado a experimentar y no me acababa de lanzar a la odisea de abrirme un blog fuera de mi madriguera, la de spaces, donde la gente era bastante correcta, comentadora y fiel a aquellos blogs que se encontraba por ahí. Durante un tiempo luché contra los que decían que los spaces no eran blogs y protesté contra la censura que Microsoft ejercía sobre su propia plataforma con el tema de los desnudos y demás. Gracias a una amiga spacera descubrí Zoomblog. Una plataforma a la que no presté mucha atención en aquel momento, pero que finalmente me descubriría el mundo de los códigos web tales como el HTML y en ellos los scripts y demás, que me permitirían construir el blog a mi gusto. Aquí pude experimentar con el blog y descubrí lo atado que estaba en spaces a las plantillas predefinidas. Aprendí también que el cambio de plataforma me llevaba a una blogosfera totalmente diferente. A este lado de la blogocosa la gente no comentaba del mismo modo. No se fidelizan al blog con la misma facilidad. Parecía todo más impersonal...más solitario. En estas estaba cuando llegó una actualización en spaces en la que se incluyó el módulo de amigos. Lo que empezó como una plataforma de blogs, derivaba finalmente hacia una red social en toda regla, donde empezaba a ser más importante de quién eras amigo que lo que escribieras en tu blog. Así que decidí cambiar de plataforma y empezar un nuevo blog en Zoomblog, el actual El Mosquitero. Pero el cariño es algo más fuerte que la propia volundad de cambio y La pardalá era donde tenía a todos mis amigos blogueros, así que empezé a alternar durante un tiempo entre las dos plataformas. Hace unos meses ocurrió algo que me hizo abandonar decididamente spaces, la censura. En medio de una protesta contra la misma, mi blog fue cerrado por Microsoft y yo privado de mi libertad de expresión en spaces. Ello me llevó a continuar blogueando en Zoomblog. Una plataforma que no me censuraba y que me permitía más libertad de movimientos. Tras la protesta y cierre de La pardalá, el paso de los días permitió que se me devolviera el blog. En aquel momento hice algo de lo que me arrepiento, borré todas las entradas del blog. Con ello volaron un montón de recuerdos, entradas y comentarios que conformaban todo lo que yo había sido en la blogocosa. El Mosquitero me esperaba para devolverme la ilusión que había perdido en los blogs. Empezar de nuevo es difícil. El ego que se hiere cuando ves que pocos te leen cuando antes sí lo hacían. La gente que no cambia de plataforma para seguir leyéndote y la necesidad de ser visto por google complican y mucho estos primeros días en la nueva plataforma. Solo la idea de tomarse esto como un reto nuevo hace que uno continúe tranquilo y de la misma forma que antes, dando su opinión sobre las cosas que pasan y respetando todo lo que puede a la gente que opina de manera diferente a la de él. Pero en eso llega un día en el que decido hablar sobre la publicidad en los blogs. Y allí caigo en la cuenta de que mi entrada es contradictoria con el blog que poseo. No puedo despotricar contra los que ponen publicidad y mantenerme en una plataforma en donde me obligan a tenerla...con lo que el cambio es, si no inmediato...si inminente. Y es hoy cuando decido cambiar de plataforma de nuevo. Comenzar un nuevo reto. Decidirme a construir de nuevo otro blog desde cero. Trasladarme a Blogger. Aquí en blogger decido mantener el nombre de El Mosquitero. Mantengo también la cabecera que me regalaron para el blog y dentro de poco de tiempo recuperaré también la imagen flotante. En realidad el cambio casi no se nota porque el blog es casi igual, pero en blogspot ya no hay publicidad. Al fin reúno las fuerzas necesarias para comenzar de nuevo. Es duro, cansado y difícil dar tantas vueltas por la blogocosa. Pero algo si que he aprendido en esto. La gente que te sigue en distintas plataformas es gente que si te lee. La gente que te enlaza es aquella a la que si que le inspira lo que cuentas. Cambiar por cambiar es negativo...pero si responde a unos principios es necesario y balsámico. Ahora seré muy poco leído de nuevo, pero no me importa, este blog no nació para ser un A-List, lo hizo solo para dar rienda suelta a mi libertad de expresión. Bienvenidos a mi nuevo blog.