Parece ahora que hay que adular al viceprimer ministro Chino y a toda aquella nación y su calaña política, porque han decidido comprarnos seis mil millones de euros de deuda Española al tiempo que se ha traído bajo el brazo unos cuantos contratos referentes a sectores tan diferentes como lo son los de las energías limpias, sistemas de control de tráfico aéreo y la exportación de aceite, vino y jamón ibérico, por un montante total de unos cinco mil trescientos millones de euros.

Li_KeqiangSegún una de las frases del discurso de Li Keqiang, tenemos el honor, no podía ser menos claro que sí, de ser el mejor amigo de su país en la Unión Europea. Algo que no pasó desapercibido, ni para un servidor, ni para todos esos dirigentes políticos que hace unos meses, cuando a Li Xiaobo le concedieron el Nobel de la Paz y éste mismo país le negó el permiso para ir a recogerlo (primera vez que el Nobel lo recibe una silla vacía), se escondieron primero tras las vaguedades para acabar sucumbiendo a la razón en aquello de condenar públicamente la actitud de éste país en lo referente a los derechos humanos y en concreto con el premiado por los Nobel y después tras la Unión Europea para mandar a su embajador a la ceremonia sin molestar a esta mole comunista llamada China.

Ha llegado el nuevo Mr. Marshall, como lo llaman en El País y con el dinero se tapan muchas otras cosas que hace tan solo dos días todos teníamos en mente. O al menos eso es lo que se intenta. Por ejemplo; si no hubiese tanta mercancía china en las tiendas Españolas y la mitad de ella fuese de origen Español, puede que las empresas de aquí no se vieran obligadas a despedir a gente con lo que no habría tanto españolito de a pie en la cola del paro. Si son tan buenos los chinos, porqué han destruido el sector del calzado, el del textil, o el de las nuevas tecnologías…

Cómo puede ser posible que en un país tan progre como el que vivimos, el capital cobre tanta fuerza como parece cuando más de uno sufre un ataque de onanismo compulsivo al ver a un izquierdista reconocido comprando deuda e invirtiendo en empresas de aquí, cuando hasta ayer en lo único que trabajó ese mismo dirigente fue en anularlas y competir deslealmente con ellas al tiempo que provocaba sus cierres y quiebras masivas.

Cómo de mal debemos de estar cuando este mismo gobierno nuestro, unido al empresariado y a la derecha del país, le han puesto una alfombra roja a los pies del viceprimer ministro y aspirante a Presidente en 2013, adulando, agasajando, lisonjeando y dándole coba no a un dirigente elegido democráticamente, sino más bien a un representante que es referente en todo el mundo en lo que se refiere a la pena de muerte (primer país con diferencia en este tipo de condenas en todo mundo), la tortura policial, el trabajo infantil, el infanticidio, el rapto de mujeres y el arresto indiscriminado de periodistas, amén de las violaciones sistemáticas de los derechos humanos y la negación a su pueblo de una vida democrática anclándolo así a un sistema dictatorial de izquierdas.

Cómo estará de mal la cosa, que hemos sido capaces de olvidarnos de todo ello por tan sólo once mil miserables millones de euros de mierda. ¿Es al final ese el precio que le ponemos a la libertad en China?¿Y el que le ponemos a todas las empresas que han cerrado en nuestro país y que han hundido los bajos precios y la explotación infantil en China?

Díganmelo porque si su respuesta es que sí, yo prefiero bajarme del barco y volver a nado a la orilla…

2 Comentarios:

    ¿Cuanto nos va a costar la broma?... no, no hablo de dinero...

    Yo no lo se, pero como mínimo pasará lo de hoy, que he entrado en un bar de los de toda la vida a comer y lo regentaban unos chinos que hacían un codillo al horno que más de uno del terreno quisiera emular jejeje

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